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La destreza básica en la ubicación y reconocimiento de las abejas sin
aguijón está limitada a muy pocas personas. En este sentido se realizó un intercambio
de información utilizando métodos participativos, donde se entrevistaron pobladores
rurales expertos en estas técnicas, complementado con la experiencia de los autores.
Estas técnicas podrán apoyar nuevos estudios en la ubicación y reconocimiento de las
abejas sin aguijón. La investigación arrojó las siguientes prácticas:
Las técnicas constituyen una guía para la obtención de destrezas en la ubicación de las abejas sin aguijón en el campo. Aunque su utilización puede mejorar el proceso de aprendizaje, se recomienda apoyarse en personas con experiencia.
The ability to locate and recoognize
stingless bees is limited to few people. An exchange of information through participatory
methods was carried out, where resident rural experts were interviewed in these
techniques, supplemented with the experience of the authors. The following techniques were
developed:
a.
identification of the stingless bees;
b.
methods to establish their presence (places they visit): flowers, resin, water and clay
sources;
c.
nesting patterns: habitat, colony height, plant species and places where nests are found,
entrance hall characteristics, neighbor colonies;
d.
bee behavior;
e.
sounds and buzzing;
f.
marks of residues in the bark of the trees;
g.
marks and refuse from harvesting by humans;
h.
predators: Pitangus sp. Gekkonidae;
i. marks and refuse from predation by Procyonidae, Mustelidae and Myrmecophagidae.
The techniques that are described constitute a guide for developing skills to facilitate the location of the stingless bees in the field. However, the support from experienced people is recommended to strengthen the process.
Key
words:behaviour, habitats, Meliponinae,
search techniques, stingless bees,
Las abejas son un grupo diverso de insectos, con cerca de 20, 000 especies en el mundo y alrededor de 2,000 en el Neotrópico (Parra 1996; Wilson 1971). En este grupo se encuentran las abejas sociales que pertenecen a la familia Apidae, y que presentan tres sub-familias: abejas con aguijón (Apinae), Bombus o abejorros (Bombinae) y abejas sin aguijón (Meliponinae). Las abejas sin aguijón se encuentran principalmente en los trópicos y subtrópicos y su nombre deriva de su aguijón atrofiado, que no es utilizado en la defensa. De las 500 especies de abejas sin aguijón en el mundo la mayoría se encuentra en el Neotrópico. Dos grupos, los géneros Melipona y Trigona (Crane 1994), tienen importancia económica; ambos están bien representado en los llanos Venezolanos.
Los Meliponinos hacen parte de nuestra cultura desde antes de la Conquista. A sus mieles se les atribuyen virtudes medicinales desde tiempos precolombinos (Vit 1994), siendo empleadas para tratar afecciones de la nariz, oído, garganta, pulmones, heridas y quemaduras.
Estos insectos son importantes también por los servicios ambientales que prestan, al ser polinizadores de plantas silvestres. En este sentido, conocer su riqueza y abundancia es importante para su valoración como recurso natural. Su diversidad está representada en las características de nidificación, los tamaños, colores y el comportamiento (Nogueira-Neto et al 1986). Conocer como se encuentran distribuidas y los comportamientos de nidificación contribuye a la ubicación rápida de estas abejas. Sin embargo, la experiencia y la práctica son las herramientas más críticas en su ubicación.
La experiencia basada en el conocimiento ancestral, hace que muchos pobladores rurales se dediquen a la búsqueda y recolección de los productos de las abejas silvestres. Este conocimiento sobre las condiciones requeridas por cada especie de interés permite a los recolectores ubicar las colonias.
Este trabajo recopila los resultados de un intercambio de información sobre el reconocimiento de las abejas sin aguijón. La experiencia fue obtenida a través de metodologías participativas con gente conocedora en el área donde se practica la cosecha de los productos de las abejas sin aguijón. Estas técnicas y experiencias fueron corroboradas y ampliadas con trabajo de campo y complementadas con información secundaria.
El trabajo se realizó con la participación de pobladores de los municipios Guanare, Papelón y Guanarito del estado Portuguesa y los municipios Sosa y Barinas del estado Barinas, quienes conocen la actividad de recolección de los productos de las abejas. El área de estudio se ubica en la zona de vida de Bosque seco Tropical según la clasificación de Holdridge (Ewel et al 1976) y señalada como área rica en abejas sin aguijón (Rivero 1972).
Se identificaron personas conocedoras en la búsqueda y cosecha de abejas sin aguijón y se aplicaron herramientas de Diagnóstico Rural Participativo (Rietbergen-McCraken 1991; Solarte y Dolbert 1994; Gelilfus 1998) como la entrevistas semi-estructuradas y los diagramas parlantes para facilitar el flujo recíproco del conocimiento. Estos métodos de investigación permitieron el intercambio de información que después fue corroborada por otros participantes y por los autores. Adicionalmente, se complementó la información con una revisión de fuentes secundarias que refuerzan las diferentes técnicas y experiencias.
En el área de estudio se identificaron 14 personas con amplio conocimiento sobre las abejas sin aguijón. Sin embargo, la comunidad en general reconoce a estos insectos como participes de la cultura e identifica las especies de mayor importancia y sus productos. Entre las especies de mayor interés económico en la localidad se encontraron: Guanota (Melipona compressipes), Arica (Melipona favosa), Moscochola (Nannotrigona sp), Españolita (Trigona (tetragonisca) angustula) y Pico (Scaptotrigona sp).
Las técnicas más comunes para la ubicación y reconocimiento de abejas sin aguijón son:
Es importante diferenciar entre avispas y abejas, además de abeja común (Apis mellifera) y los Meliponinos. A continuación se describen algunas consideraciones. Sin embargo, se recomienda la revisión de literatura complementaria para el estudio de estas diferencias. Las abejas y las avispas pueden ser vistas colectando alimentos de las flores y formando populosos nidos. Sin embargo, existen diferencias básicas. En general el cuerpo de las abejas es piloso; presentan estructuras auxiliares para colectar polen; las alas permanecen superpuestas cuando están en reposo y el material de construcción de sus nidos es cera, resina vegetal y barro. Los adultos y sus crías se alimentan de miel y polen. Por otro lado, el cuerpo de las avispas esta despropósito de vellosidades, presentando un pecíolo entre el tórax y el abdomen; la estructura especializada para la recolección de polen está ausente; presentan alas dobladas longitudinalmente quedando en reposo; los adultos se alimentan de miel y polen; utilizan principalmente celulosa para construir sus nidos (Loisel 1992).
Estas técnicas servirán para establecer la presencia de las abejas en la zona:
En flores: Los conucos, cultivos múltiples o huertas familiares, son una buena opción para iniciar. Una alternativa rápida es la utilización de un calendario de floración (cuadro de doble entrada con especies vegetales vs. meses del año) que muestre las plantas y los períodos adecuados para buscar las abejas. Los tiempos de floración de Bravaisia intigerrima y Trichanthera gigantea son un buen ejemplo. Estas acantáceas de alta producción de néctar florecen en el área de estudio entre noviembre y febrero. Ambas plantas son visitadas por las especies de abejas sin aguijón de interés económico y por Apis mellifera.
Fuentes de resina: Las resinas son recolectadas por algunas Meliponinae para construir sus colonias. En las cicatrices del Drago (Pterocarpus sp) se observa comúnmente Melipona compressipes, mientras recolecta resinas que son utilizadas en la construcción de la entrada y tapones externos del nido.
Fuentes de agua y arcilla: Al igual que en las fuentes de resinas, se pueden encontrar los meliponinos en cuerpos de agua, donde recolectan barro que es utilizado para construir y proteger los nidos. Es común observar esta práctica en Meliponas como M. favosa que utilizan el barro solo, o como en el caso de M. compressipes, mezclado con resinas.
Tamaño, color y olor:
Según Nogueira-Neto et al (1986), en Brasil se encuentran abejas entre 2 y 12 mm de longitud como M. compressipes. Lo anterior ejemplifica la diversidad que existe en este grupo de insectos. Adicionalmente, Crane (1994), señaló que existen alrededor de 500 especies a nivel mundial. En nuestro estudio, se destacan dos Meliponas que son las de mayor tamaño y que producen el mayor volumen de miel, mientras que especies más pequeñas (Trigonas) producen cantidades menores. Estas referencias pueden orientar la búsqueda según el objetivo.
Los colores ayudan también a identificar las abejas sin aguijón. Melipona compressipes es una abeja grande de color negro. Melipona favosa es más pequeña, con franjas amarillas en el abdomen. Trigonas de poco interés económico, salvo por los daños que pueden ocasionar a algunos cultivos, tales como los pegones (Trigona sp), son de color negro intenso, mientras que T. angustula es de color amarillo y tiene ojos verdes.
Algunas especies presentan olores característicos. Un ejemplo de ello son las abejas agresivas que tienen un olor intenso y difícil de describir, como las Scaptotrigonas y las trigonas denominadas Pegones. Lestrimelita limao, otra especie de interés para los buscadores de productos de abejas por ser pilladora (roba miel a otras colonias), se identifica por su olor similar al limón.
La forma de la entrada puede ayudar a ubicar e identificar muchas especies.
La altura: Las Meliponas prefieren cavidades en las ramas de los árboles. M. compressipes, prefiere cavidades en ramas altas. Las Trigonas muestran una distribución diversa, desde el suelo hasta ramas muy altas. La Trigona (Tetragonisca angustula) prefiere cavidades ubicadas entre 0 y 3 m (Tabla 1). Moreno y Cardozo (1996) describen para esta especie una altura de 0.83 ± 0.66 m a la base de la piquera (n = 50), asociada a construcciones civiles urbanas en la cuidad de Guanare, estado Portuguesa. Las Scaptotrigona spp. son más generalistas, ya que se observan en todos los estratos arbóreos.
Tabla 1. Valores promedio de altura de la
piquera de especies de abejas sin aguijón encontradas en el perímetro urbano de la
ciudad de Guanare (Año 1997). |
||
Especie |
Nº Colonias |
Promedio ± DE (cm) |
Trigona (tetragonisca)
angustula |
88 |
82.9 ± 81.9 |
Melipona favosa |
4 |
225± 49.7 |
Nannotrigona sp |
18 |
62.5± 82.3 |
Friesella sp |
2 |
73.3± 101 |
Trigona sp |
2 |
206± 79.9 |
Fuente: Colmenares
1998. |
La forma: M. compressipes emplea una mezcla de resinas y barro para hacer la entrada, que es redonda y mimetizada. Por lo general esta resina, que es de color rojo intenso y proviene de Pterocarpus sp, orienta al investigador para ubicarla e identificarla. M. favosa elabora la piquera con arcilla y dibuja líneas o rayos radiales en el orificio. Estos probablemente contribuyen a dirigir el agua lluvia fuera de la colmena. Las arcillas son de diferentes colores característicos del suelo en el lugar de estudio.
Las trigonas que se describen a continuación elongan la piquera. Tetragonisca angustula emplea cera de color amarillo, mientras que Nannotrigona sp utiliza cera de color oscuro. En Scaptotrigona sp la piquera es de color oscuro y tiene forma de trompeta. Entre las especies estudiadas, las Meliponas no elongan la piquera mientras que las Trigonas si lo hacen. Con respecto a las piqueras, en T. angustula la longitud alcanza los 4 cm. El ancho de la entrada no supera 1 cm, mientras que M. compressipes presenta un diámetro en la entrada de más de 1 cm, sin alongar la piquera (Tabla 2).
Tabla 2. Características biométricas de las
piqueras de abejas sin aguijón. |
||||||||||
Especie |
Nº
Colonias |
Largo
piquera |
Ancho
piquera (cm ± DE) |
Fuente |
||||||
T. (tetragonisca) angustula |
50 |
2.4 ±
1.4 |
0.66 ±
0.1 |
1 |
||||||
T. (tetragonisca) angustula |
88 |
2.56 ± 1.19 |
0.56 ± 0.18 |
2 |
||||||
Nannotrigona sp |
18 |
2.27 ± 0.74 |
1.02 ± 0.35 |
2 |
||||||
Nannotrigona sp |
8 |
3.8 ±
2.7 |
1.51 ±
0.3 |
3 |
||||||
Friesella sp |
2 |
1.15 ± 0.12 |
0.55 ± 0.43 |
2 |
||||||
Melipona favosa |
4 |
---- |
0.52 ± 0.16 |
2 |
||||||
Melipona compressipes |
42 |
--- |
1.34 ±
0.47 |
3 |
||||||
Scaptotrigona sp |
32 |
3.0 ±
1.7 |
1.66
±0.65 |
3 |
||||||
Fuente:
1.- Moreno y Cardozo 1996, 2.- Colmenares et al 1998, |
||||||||||
Ubicación: Los lugares escogidos para nidificar son elementos importantes para la búsqueda de abejas sin aguijón. Un ejemplo de ello es T. (tetragonisca) angustula, que por lo general busca los troncos de los árboles y paredes huecas. No se ha observado en ramas. Sus árboles preferidos para nidificar son Gateado (Astronium graveoleus) y Naranjillo (Trichanthera gigantea y Bravaisia intigerrima).
Las abejas que nidifican en árboles prefieren las ramas que semejan nudos o codos. Para ubicarlas se observan detenidamente los sitios potenciales hasta encontrar una piquera. Posteriormente la persona detiene su mirada unos instantes para observar si salen o entran insectos. Los diámetros de las ramas también pueden ayudar a ubicar las abejas (Tabla 3).
Tabla 3. Diámetro e intervalo de confianza de
ramas donde se ubicaron abejas sin aguijón en árboles madereros del sur del estado
Portuguesa (Año 1998). |
||
Especie |
Nº
colonias |
Diámetro
rama |
M. compressipes |
53 |
30.6 ±
12.9 |
Scaptotrigona sp |
38 |
40.0 |
Nannotrigona sp |
8 |
27.0 ±
4.9 |
Fuente: Moreno y Cardozo 2002 |
Es importante la identificación de las especies de árboles donde se pueden encontrar las abejas sin aguijón. Por ejemplo, Pithecellobium saman y otras especies vegetales son utilizadas por abejas de varias especies (Tabla 4).
Tabla 4. Número de colonias de abejas sin
aguijón en árboles madereros derribados del sur del estado Portuguesa. |
||||||
Melipona favosa |
Trigona sp.* |
Scaptotrigona sp. |
Melipona compresspes |
Nannotrigona sp. |
Trigona sp. |
|
Pithecellobium saman |
2 |
7 |
36 |
52 |
7 |
1 |
Spondias mombin |
-- |
-- |
-- |
3 |
-- |
-- |
Albizzia caribensis |
-- |
-- |
3 |
1 |
1 |
1 |
Lonchocarpus pictus |
-- |
-- |
-- |
1 |
-- |
1 |
Total |
2 |
7 |
39 |
57 |
8 |
3 |
Fuente:
Moreno y Cardozo (1997), * especie de comportamiento agresivo
nombre común Pegón |
No
solamente la especie sino también el tamaño del árbol orienta
la ubicación de las colonias. En un estudio efectuado en un bosque seco tropical en Costa
Rica se midió el diámetro a la altura del pecho de los árboles que presentaron colonias
de abejas sin aguijón (Tabla 5).
Tabla 5. Promedio del diámetro a la altura del
pecho (DAP) de varias especies de árboles con
nidos de abejas sin aguijón. |
||
Especie |
Promedio
DAP (cm) |
ES |
T. testaceicornis |
47.8 |
5.3 |
T.
frontales |
49.3 |
8.3 |
T.
pectorales |
53.8 |
16.3 |
T. fuscipennis |
64.3 |
13.4 |
T. dorsalis |
71.1 |
11.2 |
T. capitata |
90.4 |
21.9 |
T. fulviventris |
93.0 |
7.5 |
T. silvestriana |
126.2 |
1.8 |
Fuente: Hubbell y Jonson. 1977 |
El comportamiento en la piquera ayuda a ubicar e identificar el tipo de abeja. En T. (tetragonisca) angustula un grupo de abejas permanece en la entrada suspendida en el aire. Al percibir elementos extraños Scaptotrigona sp muestra un comportamiento particular al formar grupos de abejas con movimiento rápido frente a la piquera. Al ser molestadas pueden atacar y morder el cabello y la piel de agresores. Un comportamiento similar ocurre con los denominados pegones (Trigona), de poco interés para los pobladores rurales.
Varias abejas presentan guardianas en la entrada. Ejemplo de ello es Nannotrigona sp, que forma en el borde interno de la piquera un aro de 6 a 10 guardianas, verde debido al color de los ojos. Melipona favosa presenta sólo una guardiana que da paso cuando sale o entra otra individuo.
Otro
comportamiento de interés es la forma de entrada. M.
favosa hace un pequeño movimiento en la piquera antes de entrar. Esto la diferencia
de M. compressipes que
hace la entrada rápidamente. La frecuencia de entrada y salida permiten también
diferenciar el tipo de abeja, principalmente cuando lo nidos se encuentran distantes. Apis mellifera
presenta un flujo abundante y constante, mientras que en abejas del genero Melipona el flujo es discontinuo y lento. Esta frecuencia puede ser
confundida con Scaptotrigona
sp, pero si se ubica una piquera elongada
se descarta que sea Apis.
Los
residuos líquidos que escurren de la corteza de los árboles pueden orientar la búsqueda
de un nido. Los líquidos dejan marcas oscuras en la parte baja de la piquera, que se
identifican con mayor facilidad sobre superficies claras. El proceso de limpieza o
depuración del nido ocurre cuando existe exceso de humedad en la colonia y principalmente
en época de lluvias. Las marcas pueden ubicarse cuando se encuentran húmedas. Sin
embargo, residuos de la colonia pueden teñir el líquido y dejar marca hasta después de
seca.
Es el número de colonias de una misma especie que se encuentran distribuidas en un área determinada. Nannotrigona sp. muestran escasa dispersión, ya que se observan colonias muy juntas. En un tronco de Gliricidia sepium se encontraron nueve colonias, lo cual sugiere que al encontrar una colonia se debe hacer una revisión para ver si hay más. En un árbol de Schoepfia sp., Hubbell y Jonson (1977) encontraron cuatro colonias, siendo esta especie la única para la cual se detectó más de una colonia en el mismo árbol. Michener citado por Hubbell y Johnson (1977) identificó una pared con 46 colonias de abejas de este género en las ruinas de Ciudad de Panamá (1977).
Una agregación espacial similar ocurre en las colonias de T. tetragonisca angustula. Moreno y Cardozo (1996) determinaron que 92% de las colonias de T. angustula (n = 50), se presentan a una distancia promedio de 13.7 ± 13.9 m. En un estudio similar, Colmenares et al (1998) encontraron para T. tetragonisca angustula una distancia entre colonias de 18.5 ± 16.4 m (n = 88), y de 11.9 ± 14.7 m (n =18) para Nannotrigona sp. En un estudio en un área natural de bosque seco tropical en Costa Rica se encontró que la distancia entre colonias estaba entre 67 y 576 m (Tabla 6).
Tabla 6. Promedio de distancia entre colonias en
bosque seco tropical, de cinco especies de abejas sin aguijón en Costa Rica. |
||
Especie |
Distancia
(m) |
DE |
T. fuscipennis |
67 |
39 |
T. fulviventris |
183 |
15 |
T.
pectorales |
116 |
49 |
T. dorsalis |
92 |
40 |
T. silvestriana |
576 |
31 |
Fuente: Hubbell y Johnson (1977). |
Algunas
veces se presentan dificultades para observar las entradas de las colonias. En estos
casos, se deben hacer barridos observando las ramas y sitios potenciales de nidificación para después colocar el firmamento como fondo. Cuando
se observan puntos negros que se desplazan desde y hasta la posible colonia, se deben
seguir estos puntos para identificar el lugar de la piquera.
Cuando salen o entran de las colonias, las abejas emiten sonidos que pueden servir para encontrar el lugar de donde provienen. Si no se está seguro de la ubicación, la persona se debe mantener en silencio en un sitio, esperando la llegada de otros individuos que delatan la colonia. Esto es aplicable con facilidad a las abejas grandes Meliponas. Cuando no se está seguro, se puede golpear el tronco con objetos. Como respuesta algunas especies emitan sonidos que ayudan a detectarlas. Sin embargo, dependiendo de la especie al sentir el intruso se alteran y atacan, como las Scaptotrigonas y las Trigonas denominadas pegones.
Dado que el consumo de los productos de Meliponinos es una práctica común en los llanos de Venezuela, algunos productos de la colonia quedan como desperdicios después de la cosecha. Estos pueden orientar la ubicación de un nido. La cosecha de los productos de las abejas, principalmente cuando es efectuada por personas conocedoras, puede ser efectuada sin destruir la colonia. Esta puede seguir siendo cosechada por años.
Depredadores:
Algunos
depredadores vertebrados ayudan a ubicar las colonias. Un caso concreto es el Pitangus sulphuratus, un ave insectívora que se puede observar en las
ramas, donde se lanzan a la captura de insectos. Si esta acción es repetida hacia un
mismo lugar se debe revisar el sitio porque posiblemente se encuentra en él una colonia.
Otro depredador, es Tuteque o limpia casa de la Familia
GECKONIDAE posiblemente del genero Hemidactylus,
los cuales se pueden observar en ocasiones consumiendo abejas en las entradas de las
colonias.
Algunos miembros de la familia PROCYONIDAE, MUSTELIDAE y MERCOPHAGIADAE, consumen productos e insectos de abejas sin aguijón, los cuales dejan residuos, cicatrices y marcas que pueden ser observadas, para verificar la presencia de la colonia.
·
El
conocimiento ancestral y su recuperación son importantes para el desarrollo de destrezas
en la búsqueda de información básica de especies silvestres, como las abejas sin
aguijón.
·
Se
presentan 11 técnicas que fueron validadas a través estudios posteriores y
complementadas con información bibliografica..
·
Las
técnicas aquí descritas servirán de guía en el proceso de adiestramiento de nuevos
investigadores.
Se
agradecen a las siguientes personas e instituciones: E A Villaruel
y familia, David Balsa, Domingo Seijas, Faraón Seijas, Hermanos Avila, Familias Urriola, Díaz, Monzón, Daza, Camacho, UNELLEZ, Postgrado en RNR,
CENDI, ASOMUSEO, Herbario de la UNELLEZ, Servicio de Pesca y Vida Silvestre de los EEUU,
ECONATURA y CONICIT. También a Carlos Urriola, Andrés
Palencia, Luisa Díaz y Antonio González Fernández. A Luisa Díaz, Zoraida Calle
y José Manuel Mora por sus aportes al documento final.
Colmenares V, Uzcategui
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Received 10 October 2001