Livestock Research for Rural Development 16 (1) 2004

Citation of this paper

Efecto de diferentes niveles de inclusión de parota (Enterolobium cyclocarpum) en el desarrollo de ovinos en estabulación

Noel Peralta*, José Manuel Palma** y Rafael Macedo***

* FMVZ - Universidad de Colima. Tecomán, Colima, México.
** CUIDA - Universidad de Colima. Tecomán, Colima, México. palma@ucol.mx
*** Asesor privado. Paul P. Harris 28. Colima, Colima, México. macedo@ucol.mx
 

Resumen

Se evaluó el efecto productivo y económico de la inclusión de harina del fruto de parota Enterolobium cyclocarpum en el desarrollo de ovinos en estabulación en Colima, México. Se compararon niveles de 10, 20 y 30% de inclusión contra una ración testigo que contenía 63% de grano de maíz, 20% de rastrojo de maíz, 15% de pasta de soya y 2% de minerales.

La incorporación de Enterolobium cyclocarpum permitió mantener la ganancia diaria y total de peso así como el consumo de la materia seca sin diferencia estadística entre tratamientos, con una disminución significativa en el costo de la ración.

Palabras clave: borregos de pelo, carne, leguminosas.


Effect of diets with different levels of Enterolobium cyclocarpum fruit meal on growth of Hair sheep in confinement

Summary

The incorporation of Enterolobium cyclocarpum fruit meal and its productive and economical effect on confined sheep, were evaluated in Colima, Mexico. Three levels of 10, 20 and 30%, were compared against a control diet based on corn grain (63%), corn stubble (20%), soybean meal (15%) and minerals (2%). The variables under study were daily and the total weight gain as well as the dry matter intake.

The results showed no significant differences between levels of incorporation of Enterolobium cyclocarpum fruit meal and the control diet with a significant reduction of the cost of the diet and the meat produced.

Key words: hair sheep, legumes, meat, trees.


Introducción

En México la producción de carne, especialmente de ovino se ha implementado bajo sistemas de producción basados en la utilización de raciones con un alto contenido de grano importado de países desarrollados, situación que origina una marcada dependencia de tecnología y de insumos (Sánchez 2001). Asimismo, los resultados económicos de la actividad son con frecuencia poco favorables, toda vez que la viabilidad económica de dichos sistemas se fundamenta en la oferta y el precio de los cereales, factores de alta variabilidad para nuestras condiciones.

En el trópico de nuestro país, como en el resto de América tropical se cuenta con una gran cantidad de especies forrajeras arbóreas, las cuales, se han destacado como un recurso alimenticio tradicional durante la época seca, siendo utilizado su follaje mayoritariamente bajo sistemas de pastoreo. Recientemente, dado su alto valor nutritivo, algunos autores han reconocido la posibilidad de incrementar los índices productivos de la ganadería tropical, por medio de la incorporación de los frutos de los árboles forrajeros, como un sustituto parcial de los granos en raciones integrales para el ganado (Zamora et al 2001).

Por lo anteriormente mencionado, el presente trabajo evaluó el efecto productivo y económico de la inclusión de diferentes niveles de harina de fruto de parota Enterolobium cyclocarpum (Jacq) Griseb en el crecimiento de ovinos en estabulación en Colima, México.


Materiales y métodos

El trabajo se realizó en el Módulo de Producción Ovino del Centro de Capacitación Agropecuaria y Forestal A. C., ubicado en el municipio de Tecomán, Estado de Colima, México, en las coordenadas 18°58'43'' N y 103°52'18'' O, a una altitud de 33 msnm. El área de estudio tiene un clima semicálido correspondiente a la fórmula BS1(h')w(w)(i') , con una temperatura media anual de 26 ºC y 750 mm de precipitación media anual localizada entre los meses de Junio a Septiembre (García 1973).

Se utilizaron 24 ovinos machos enteros destetados de la raza Pelibuey con edad y peso promedio de 3.5 meses y 14.3 kg respectivamente, los cuales fueron agrupados en cuatro grupos de seis animales cada uno y se les ofreció cuatro raciones de las cuales (EL0) se manejo como testigo, al ser representativa de las raciones recomendadas actualmente para el desarrollo de ovinos en estabulación. Esta ración sirvió como base para la elaboración de los otros tratamientos (EL10. EL20 y EL30,), mediante su substitución por distintos niveles de harina de fruto de parota (Cuadro 1). La harina se elaboró recolectando las vainas directamente del suelo, para su posterior secado al sol durante seis horas y molido en un molino de martillos, realizándose el análisis químico proximal de dichas raciones con la metodología propuesta por AOAC (1990).

Cuadro 1: Composición de las raciones experimentales

Ingrediente, %

EL0

EL10

EL20

EL30

Harina de parota

0

10.0

20.0

30.0

Grano de maíz

63.0

56.7

50.4

44.1

Rastrojo de maíz

20.0

18.0

16.0

14.0

Pasta de soya

15.0

13.5

12.0

10.5

Minerales

2.0

1.8

1.6

1.4

El experimento tuvo una duración de 63 días con una semana previa de acostumbramiento a las raciones. Al inicio de la prueba los animales fueron destetados, pesados, identificados y vitaminados por vía intramuscular con 500 000, 50 000 y 50 U.I. de vitamina A, D3 y E respectivamente. Asimismo, se les administró una dosis oral de 7.5 mg kgPV-1 de Albendazole para el control de parásitos internos y se colocaron por parejas con similar peso inicial en corraletas, en las cuales se ofrecieron las raciones ad libitum. El horario de alimentación fue a las 8:00 hrs previa recolección del rechazo del día anterior y se permitió un 10% de rechazo con ajustes diarios.

En forma semanal se evaluó el peso vivo y diariamente el consumo total de materia fresca (CTMF), determinándose al final del estudio la ganancia diaria de peso (GDP), la ganancia total de peso (GTP), la conversión alimenticia (CA), el costo del kilogramo de carne (CC) y el consumo diario de materia seca (CDMS) expresado como peso en gramos de materia seca consumida por día, así como en gramos de materia seca consumida por kilogramo de peso metabólico.

Los resultados se sometieron a un análisis de varianza (ANDEVA) con un diseño completamente al azar con seis repeticiones correspondientes al número de animales por grupo. La comparación entre medias se realizó por medio del método de Tukey fijando un alfa de 0.05 (Cochran y Cox 1991; SAS 1990).


Resultados y discusión

En el Cuadro 2, se observa como el nivel máximo de inclusión de parota incrementó en 2.6 unidades porcentuales el contenido de proteína cruda así como en un 55% el contenido de grasa de la ración.

Cuadro 2: Análisis químico proximal de las raciones experimentales

 

EL0

EL10

EL20

EL30

Materia seca ,%

90.02

87.93

89.66

88.68

Proteína cruda, %

11.60

13.78

13.65

14.21

Materia orgánica

87.93

91.21

91.06

89.80

Fibra cruda, %

13.97

12.93

12.60

13.98

Extracto etéreo, %

2.22

2.28

3.30

3.49

Extracto libre de nitrógeno, %

60.14

62.22

61.49

58.12

Cenizas, %

12.07

8.79

8.94

10.20

Energía metabolizable, Mcal/kgMS*

2.99

2.93

2.87

2.81

* Calculada

 

 

 

 

La inclusión de los diferentes niveles de harina de parota  no modificó significativamente (P>0.05) el PF, la GDP, la GTP y el CDMS con respecto a la ración testigo (Cuadro 3).

Cuadro 3: Efecto de diferentes niveles de inclusión de harina de parota Enterolobium cyclocarpum sobre el comportamiento productivo de borregos en estabulación

Tratamiento

EL0

EL10

EL20

EL30

± ES

Prob.

Peso inicial, kg

16.1

13.3

13.2

14.5

0.456

0.062

Peso final, kg

26.7

23.8

23.3

22.3

0.937

0.411

Ganancia diaria de peso, g

168

168

160

125

11.7

0.507

Ganancia total de peso, kg

10.6

10.6

10.1

7.83

0.741

0.499

Consumo diario de materia seca, g

898

774

610

583

48.1

0.053

Consumo de materia seca, g/kgPV.75

88.1

79.3

68.3

64.9

4.23

0.186

Las ganancias diarias de peso fueron superiores a las indicadas por Bonilla (1999), González et al (1989) y Pérez et al (1991). En el caso de Bonilla (1999), con niveles de 12 y 24% de inclusión de harina de parota en una dieta con un contenido de 40% de rastrojo de maíz y 14% de grano de sorgo obtuvo GDP de 127 g/día. Los resultados de González et al (1989), mencionan GDP de 96 a 102 g con niveles de inclusión de 15 y 30% de harina de parota en raciones basadas en 73 y 63% de rastrojo de maíz respectivamente. Pérez et al (1991), encontraron 101 y 141 g de GDP con inclusiones de 10 y 20% de la harina cuando proporcionaron 40% de rastrojo de maíz y 20% de sorgo, con animales criollos y de un peso inicial de 22 kg. Es de mencionar que todas las raciones señaladas con anterioridad presentaron un mayor contenido de forrajes fibrosos así como una menor inclusión de grano con respecto a las raciones probadas en el presente estudio, lo cual influyó en los resultados.

Por otra parte, Moscoso et al (1995), no encontraron diferencias significativas al incluir 0, 12, 24 y 36% de harina del fruto de parota como sustituto de grano de sorgo y pasta de algodón en borregos Katahdin, Black Belly y sus cruzas, consiguiendo una GDP promedio de 229 g, esta diferencia posiblemente se deba al tipo racial empleado en nuestra observación.

Pese a no existir diferencias estadísticas en el consumo de las diferentes raciones experimentales, los resultados mostraron una tendencia negativa entre el consumo y el nivel de inclusión de harina de parota en la dieta. Esta tendencia coincide con los resultados obtenidos por González et al (1985), quienes encontraron una disminución en el consumo de materia seca al comparar un nivel de inclusión de 31.1% en contra de 0 y 15.5%. Otros autores como González et al (1989) y Amaro et al (1993), ubicaron el máximo consumo voluntario de materia seca en niveles de inclusión del 31 y el 48% respectivamente, en tanto que Bonilla (1999), indica consumos voluntarios crecientes conforme incrementó la inclusión de parota en la dieta de 40 a 61%.

Los resultados anteriores mostraron una gran variabilidad entre la relación que guardan el nivel de inclusión de harina de fruta de parota y el consumo de materia seca de las diferentes raciones. Este fenómeno pudiera estar explicado por los diferentes tiempos de secado del fruto y de almacenado de la harina referidos por los distintos autores. En este estudio, el fruto fue secado al sol por espacio de seis horas, mientras que Pérez (1991) utilizó ocho días de exposición. Asimismo, en ambos casos el fruto fue molido y ofertado a los animales con periodos cortos de almacenamiento, en tanto Alvarez et al (2003), utilizaron la harina de parota después de un año de almacenaje. Esta situación pudo influir en algunas de las características organolépticas del alimento modificando su consumo.

La figura 1, muestra como los animales alimentados con los tratamientos EL0 y EL10 presentaron un crecimiento constante con tendencia lineal durante el desarrollo de la prueba, en tanto los sometidos a los tratamientos de mayor inclusión de parota (EL20 y EL30), tuvieron fluctuaciones en su desarrollo, fenómeno acentuado en el tratamiento EL30. Esta situación pudiera estar relacionada con la necesidad de un mayor periodo de acostumbramiento del animal al consumo de la harina de parota manejada bajo las condiciones del presente trabajo.


Figura 1. Cambio de peso vivo de ovinos alimentados con diferentes niveles de inclusión de parota (E. Cyclocarpum)

La conversión alimenticia fue estadísticamente similar para todos los tratamientos, en tanto el costo de la ración decreció significativamente (P<0.05) entre un 5 y 14% en la medida en que se incrementó el aporte de harina de parota en las raciones, fenómeno que afectó positivamente (P<0.05) el costo de alimentación por kg de carne producida, con la inclusión de 20% de harina de fruto de parota comparado con la ración control (Cuadro 4).

Cuadro 4: Conversión alimenticia y análisis económico de la inclusión de diferentes niveles de harina de parota  Enterolobium cyclocarpum en borregos en estabulación

Inclusión de parota,  %

Conversión alimenticia*

Costo de la ración,
$ **

Costo alimentación
 por kg carne, $ **

0

5.3 : 1 a

2.03 a

10.76 a

10

4.7 : 1 a

1.99 b

    9.35 ab

20

3.9 : 1 a

1.85 c

    7.21   b

30

4.7 : 1 a

1.78 d

    8.37 ab

± ES

0.225

0.022

 0.471

Pr > F

0.210

  0.0001

 0.024

a b c d  Literal diferente por columna indica diferencia estadística (P<0.05)
*   Materia seca
** Pesos mexicanos. Tipo de cambio 10.50 pesos por dólar estadounidense.

La conversión alimenticia de los animales en todos los tratamientos con inclusión de harina de fruto de parota fue mejor a la encontrada por Bonilla (1999), quien al utilizar una inclusión de 48% en la ración obtuvo una CA de 8:1. La disminución observada en el costo de la ración conforme se incrementa el nivel de leguminosa en raciones integrales para ovinos en estabulación, se torna consistente comparada con otros trabajos, como el de Palma y Huerta (1999), quienes incluyeron niveles de 10 y 20% de harina de Leucaena leucocephala logrando una disminución del 15% del costo de alimentación. Finalmente Pérez et al (1991), mencionaron que con la inclusión de 20% de harina del fruto de parota, se consiguió la mejor conversión alimenticia y el menor costo de producción por concepto de alimentación, resultado similar al encontrado en este trabajo.


Conclusiones


Reconocimientos

Al proyecto "Suplementos activadores de la función ruminal en asociación de forrajes tropicales". Fondo Ramón Alvarez Buylla - Universidad de Colima.

A J. Isabel López y Rafael Alcaraz, trabajadores del módulo ovino por su apoyo en la realización del trabajo de campo.


Referencias

Alvarez M G, Melgarejo V L y Castañeda N Y 2003 Ganancia de peso, conversión y eficiencia alimentaria en ovinos alimentados con fruto (semilla con vaina) de parota (Enterolobium cyclocarpum) y pollinaza. Veterinaria Mexico 34(1):39-46.

Amaro G R, Bonilla C J A y Llamas L G 1993. Consumo voluntario y digestibilidad in vivo de dietas con inclusión de vaina de guanacastle en ovinos. Memorias de la Reunión Nacional de Investigación Pecuaria. Guadalajara, Jalisco, México. pp. 130-132.

AOAC 1990 Official Methods of Analysis. Association of Official Analytical Chemists. 15th. Edition, Washington D.C. USA. 70 p.

Bonilla C J A 1999 Uso de vaina de parota en dietas para finalización de ovinos. En 500 Tecnologías Llave en Mano. Primera Edición. SAGAR - INIFAP. México, D.F. p. 20.

Cochran W G y Cox G M 1991Diseños Experimentales. 2ª Ed.-México. Trillas, 1991. 661 pp.

García E 1973Modificaciones al sistema de clasificación climática de Köppen (Para adaptarlo a las condiciones de la República Mexicana). Segunda edición. Instituto de Geografía de la Universidad Nacional Autónoma de México. México, D.F. 246 p.

González M S, Sánchez A y Altamirano A 1985 Evaluación del valor nutritivo de la parota (Enterolobium cyclocarpum) en la alimentación de ovinos. Tesis de Licenciatura. Universidad Autónoma de Chapingo. Chapingo, México. 42 p.

González S A, Ariceaga N, Altamirano A y Huerta M 1989 Evaluación del valor nutritivo de la parota (Enterolobium cyclocarpum) en la alimentación de ovinos. Memorias del Segundo Congreso Nacional de Producción Ovina. San Luis Potosí, México. pp 113 - 115.

Moscoso C, Veles M, Flores A y Angudelo N 1995Effects of guanacaste tree Enterolobium cyclocarpum (Jacq). Griseb. fruit as replacement for sorghum grain and cotton-seed meal in lambs diets. Small Ruminant Research. 18:121-124.

Palma J M y Huerta A 1999Engorda de ovinos en confinamiento con diferentes niveles de inclusión de heno de Leucaena leucocephala. VI Seminario Internacional sobre Sistemas Agropecuarios Sostenibles. CIPAV. Cali, Colombia. p 71.

Pérez E 1991 Utilización del fruto de guanacaste (Enterolobium cyclocarpum Jacq. Griseb) en la alimentación de borregos criollos en los Altos de Chiapas. Tesis de Licenciatura. Universidad Autónoma de Chiapas. Villaflores, Chiapas, México. 61 p.

Pérez E, Perezgrovas R y Sosa R 1991 Utilización del fruto del guanacaste (Enterolobium cyclocarpum) como fuente de proteína en la alimentación de borregos. Memorias del Cuarto Congreso Nacional de Producción Ovina. Chiapas, México. pp 10 - 12.

Sánchez C 2001Estrategias para la engorda de corderos en corrales. La Revista del Borrego. 2(9):10-11.

SAS 1990 SAS/STAT. Guide for personal computers. Versión 6.06 Edition. SAS Institute Inc. Cary, N.C. USA. 890 p.

Zamora S, García J, Bonilla G, Aguilar H, Harvey C e Ibrahim M 2001 ¿Cómo utilizar los frutos de guanacaste (Enterolobium cyclocarpum), guácimo (Guazuma ulmifolia), genízaro (Pithecellobium saman) y jícaro (Crescentia alata) en alimentación animal? Agroforestería en las Américas. 8(31):45-49.


Received 22 March 2003; Accepted 30 September 2003

Go to top